No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas / Laura Norton

Título: No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas
Autor/a:  Laura Norton
Editorial: Espasa
Págs: 352
Sinopsis:
Si estás leyendo estas líneas  es que te ha llamado la atención el título.¿Te gustaría decírselo a alguien?¿Serías capaz de decírtelo a ti mismo?Y lo más importante: ¿te gustaría mantener durante un buen rato la sonrisa que se te ha quedado en la cara? Pues esta es tu novela.Te podríamos contar con más o menos gracia de qué va la cosa, para que te hicieras una idea: que si la protagonista, Sara, es muy maja, que si tiene un trabajo muy interesante (es plumista, ¿a que nunca lo habías oído?), que si es un pelín obsesiva y alérgica a los sobresaltos... Por supuesto, la vida se le complica y se encuentra con que su piso se convierte en una especie de camarote de los hermanos Marx cuando en la misma semana se meten a vivir con ella su padre deprimido, su hermana rebelde y su excéntrico prometido y, sobre todo, el novio al que lleva mucho tiempo sin ver... Pero mejor no te lo contamos porque te gustará leerlo. Lo único que necesitas saber es que, desde el título, te garantizamos unas cuantas horas de descacharrante diversión como hacía tiempo queno disfrutabas.


Opinión Personal:

Creo que nuestras expectativas a la hora de leer un libro son determinantes en nuestra opinión final. Sí, ya sé que no acabo de descubrir la pólvora, pero creo que lo que esperamos de un libro es uno de los factores más determinantes, por no decir el que más. Y en este tipo de libros aún lo es más.
En varias páginas lo clasifican como "chick lit", género del que suelo huir (para gustos, colores), pero aunque este libro tenga retazos de ese género (treintañera en apuros, hombres inalcanzables e incluso el típico amigo gay), no lo considero así por lo siguiente: Nuestra protagonista, Sara, no está obsesionada por la ropa, ni por el peso ni por encontrar al hombre de su vida.
La historia arranca con un sueño, Sara quiere ser plumista (sí, yo tampoco sabía de la existencia de esta profesión). Y, personalmente, que todo vaya precipitándose a partir de la búsqueda de ese sueño, fue un detalle que me enganchó. El sueño de Sara era muy difícil y quería saber dónde llegaba y cómo.
Un 10 para Laura Norton por librarnos de la típica treintañera histérica y desesperada porque "se le pasa el arroz". Y un 10 también por crear una historia en la que se nos presenta lo difícil que es perseguir una vida y un oficio que se salen de "lo normal".

No recordaré a Sara como el personaje protagonista más trabajado, ni como mi personaje literario favorito, pero es un personaje divertido, con cuyos pensamientos y situaciones, podemos sentirnos identificadas.
El resto de personajes: Lucía (su hermana), Roberto (su novio), sus padres, Eric (el "vikingo") me han parecido creíbles y divertidos, cada uno aportaba un sabor diferente a esta historia.

Las situaciones que se dan, se van encajando la una con la otra, de tal forma que tienes que seguir leyendo más, porque además, su lenguaje claro y directo y sus diálogos tan divertidos, hacen que deslices una página tras otra sin casi darte cuenta.
Si tengo que ponerle alguna pega es que en un par de ocasiones, supe lo que iba a pasar antes de leerlo y que el final me pareció algo previsible y un pelín forzado.

Al principio, he remarcado la importancia de las expectativas, porque uno no puede abrir este libro esperando historias rebuscadas ni tramas intrincadas, personajes profundos, ni lecciones de vida.
Es un libro hecho para entreter, leerlo de una sentada, y dependiendo del sentido del humor del lector, reírse un poco. Es ideal para esos momentos en los que nos sentimos agobiados/as y no nos apetece tener que concentrarnos demasiado, pero si evadirnos. Para mí, este libro cumple la misma función que cualquiera de los de David Safier.

Conclusión final:
Pros: Libro fácil de leer, ameno y divertido. Con muchos diálogos y situaciones cómicas y divertidas. Contras: Previsible en algunas ocasiones. Final flojo